Capítulo treinta {ST} {ÚLTIMO}

La gente crece y eso hicimos todos, yo tenía veinticinco años, Dani veintisiete y el pequeño cinco, el tiempo ha pasado muy rápido, parece que fue ayer cuando toda esta historia comenzó, cuando yo llegué a esa casa donde estaba él, donde nos odiábamos hasta más del límite, cuando nos dimos nuestro primer beso, nuestras discusiones, también estuvo Sebastían y Karen pero eso no tenía nada que ver con lo que yo quería recordar, también estuvo nuestra primera vez, nuestros tatuajes, nuestro casamiento, cuando él se marchó de gira y ninguno podíamos soportar estar tan lejos del otro, cuando se escapó y vino a verme, la gran discusión que tuvimos, más tarde se arregló todo pero volvimos a discutir, luego estuvo Patricia pero tampoco quería recordar eso, hace solo cinco años vino mi embarazo y ahora estamos aquí, tantas cosas vividas, buenas y malas pero al final todo se arregla.

-¡Papá!.- gritó 

-¡¿Qué?!

-¡Te voy a pillar!

-¡No creo!.- los observé y era inevitable no sonreír, ahora tenía una familia a la que amaba con todo mi corazón, un marido al que por mucho que hayamos discutido le amaba como el primer día, un hijo al que quería más que a mi propia vida, que si algo le pasaban a ellos dos era capaz de matar a quien fuera. 

-Venga chicos, es hora de comer.- dije saliendo al jardín

-¡Espera mamá, cinco minutos por fa!

-Se va a enfriar la comida.- 

-Solo cinco minutos _____

-Está bien pero yo también quiero jugar, ¿puedo?.- me acerqué

-Claro.- me abrazó el peque, sonreí y le alboroté el pelo

-Hijo ven.- los dos hombres de la casa me dejaron apartada por un momento.- ¿qué planeáis? 

-A la de tres ¿vale?.- escuché susurrar a Daniel.- una, dos y tres ¡a por mamá!.- vinieron corriendo los tres y yo pues intentaba escapar aunque era complicado, dos contra uno..mmm no podía. 

-Te alcancé.- me besó la mejilla Daniel

-Yo también.- contestó el peque

-Claro somos dos contra uno, eso no vale.- reí

-Yo voy con mamá.- dijo 

-¿No ibas conmigo peque?

-No no, todo era una trampa.- rió

-Ja, ven aquí hijo mío, tiremos a papá al suelo.- nos echamos encima de él, yo estaba encima de él y el peque encima mío.

-No no no eso es trampa.-

-No hay reglas.- sonreí

-Exijo un beso.- me acerqué a él, vi que cerró los ojos y me aparté.- cuando vengas a comer tendrás tu beso

-Malvada.- se levantó y se limpió el jersey un poco

-Vamos peque, papá es muy lento.- le cogí de la mano y fuimos a la cocina.

A partir de aquí escuchad esta canción pls http://www.youtube.com/watch?v=fXNQj6C6ndQ

Lavé los platos mientras Dani fue a bañar al peque, puse algo de música y bailaba mientras. Cuando acabé fui a la nevera y cogí fresas con nata, me apetecían, me apoyé en la encimera y de repente sentí unas manos dentro de mi jersey, sonreí para mi misma.

-¿Qué haces?.- susurró en mi oído, me di la vuelta y quedé frente a él

-Comer.- mordí un trozo de fresa

-Oh.- me miró penetrante, me acorraló contra la encimera, sus dos brazos estaban alrededor de mi cintura
-No estamos solos.- acaricié su mejilla
-Está durmiendo, no te tienes que preocupar.- besó mi cuello delicadamente.
-¿Tiene qué ser aquí?.- pregunté acariciando su nuca
-¿Recuerdas ese día en el que la mesa de la cocina se volvió en lo más excitante?
-Si
-Ese día en el que la mermelada tomó protagonismo, ese día en el que te hice gritar tanto.- susurró en mi oído mientras me acariciaba el muslo
-Si.- suspiré.-me acuerdo
-¿Y qué tal si retomamos la tradición?.-sonrió en mi oído y eso hizo que me provocara un escalofrío.
-No hay mermelada.-le saqué la lengua
-¿Quién ha dicho que la vayamos a necesitar?.-le miré a los ojos y de repente estaba subida a la encimera, él se puso entre mis piernas y comenzó a besarme. Mis manos pasaron a entrelazarse en su pelo delicadamente, besé su cuello y desprendía un aroma tan agradable. Sus manos rozaban mi espalda y me provocaban piel de gallina, le quité la camiseta en un abrir y cerrar de ojos.
-No hagamos mucho ruido ¿de acuerdo?.-Daniel asintió y me cogió de las caderas haciendo que mis piernas se engancharan a su cuerpo. Me sentó encima de la mesa y mi camiseta desapareció también. Me besaba con tantas ganas que de tan solo verle me entraba la risa.
-¿De qué te ríes?
-Estás desesperado
-Un poco, quiero disfrutarte
-Y lo harás pero tranquilo, hay tiempo suficiente.-acaricié su mejilla
-Vale.-me sonrió, vi que se desabrochaba el pantalón y este se quedó en el suelo. Mi pantalón desapareció también, mi cuello era su presa favorita por así decirlo, mi cabeza se inclinaba hacía atrás, noté sus manos bajar mi ropa interior, nota pendiente, comprar una mesa nueva.
-Tómame de los pies a la cabeza porque quiero ser la lava que derrama tu volcán de miel.-susurraba y pues yo no podía, tenía la voz ronca de la excitación.
-Bésame, tápame la boca con tu boca porque quiero arder.-dije casi inaudible. Rodee su cuello con mis brazos y él se introdujo en un pis pas, iba a gritar pero me calló con un beso. Me tumbó sobre la mesa cual ya en un pasado se usó para lo mismo.
-Te amo.- susurré en su oído
-Yo más.-contestó como pudo, mi cuerpo se estremecía con cada embestida suya, cada movimiento hacía que el clímax estuviera a punto de llegar. Estaba muy sorprendida, nunca antes habíamos hecho el amor de esta forma y me gustaba. Su boca dejaba marcas de besos por todo mi cuerpo, en estos momentos estaba indefensa, no podía moverme mucho. Mis piernas temblaban y él sabía que yo estaba al límite de la excitación.
-Si sigues así voy a estallar.-me agarré al mantel de la mesa mientras él besaba mis muslos, cada vez subía terminando en mi sexo, su boca hacía magia y si se mantenía mucho tiempo de esta forma mi cuerpo decidiría que hacer. De nuevo su boca ascendió hasta mi cara, besó mi lóbulo y solté un pequeño gemido. Cogió mis piernas y las enroscó a su cintura, sus brazos se apoyaron a cada lado de mi cuerpo quedando a una distancia de mi. Mis manos lo atrapaban y arañaban su espalda.
Nuestros corazones palpitaban tan rápido que casi se podrían oír.
-Va a llegar.-dije y así fue, la última embestida fue la ganadora, los dos llegamos al éxtasis. Esto si que era disfrutar.


Los dos nos comenzamos a vestir, recogimos todo para que nada quedara sucio.  



-Dani.-pronuncié.-¿me abrochas el sujetador?.-se acercó sonriendo
-Eres tan maravillosa.-lo abrochó y rodeó mi cintura por detrás.

-Tú has empeorado.-con tan solo decirle eso me apretó contra su cuerpo.
-No mientas.-susurró, me solté de su agarre y ahora yo lo puse contra la pared.
-Cuidado que yo también sé hacerme la sensual.-le guiñe un ojo y me marché dejándolo solo.
-_____ 
-¿Qué?
-¿Compraremos una mesa nueva verdad?.-sonrió picaramente y le devolví la sonrisa.



Era de noche, esta vez pedimos una pizza familiar.

-¡A cenar!.- dijo Dani y los dos fuimos a la cocina.
-¿A dónde vas papá?
-Hoy cenaremos en el jardín.- me sonrió y yo aguanté la risa
-¿Por qué?
-La mesa no es muy estable, tu madre que sin darse cuenta se sentó encima y se a desestabilizado.
-¿Perdona? ¿me estás llamando gorda?
-Ya sabes de lo que hablo.- me guiñó un ojo
-Anda Dani ves al jardín, ahora vamos papá y yo
-Vale.- el peque salió 
-Cuida las palabras que dices subnormal.- le pegué en el hombro
-No me pegues.- me cogió como un saco de patatas mientras llevaba la pizza en la otra mano y salimos al jardín.- ya estamos aquí
-Papá
-¿Si hijo?
-¿Por qué llevas a mamá como un saco de patatas?
-¡Suéltame!.- le golpeaba la espalda
-Tu madre me ha pegado y pues este es su castigo.- Dani se levantó de la mesa y fue a pegarle en la tripa a Daniel
-Baja a mamá
-Ay ves, haz caso a tu hijo y bájame si no quieres que haya consecuencias.- me bajó pero me acercó a él
-¿Qué consecuencias?.- me solté de su agarre
-Estás muy revolucionado 
-Tú provocas todo
-Que tonto eres
-Pero me quieres
-Si si.- cogí un trozo de pizza.


La noche se pasó bien, risas, bromas y mucho más.


-Me voy a duchar ¿vale?.- pronuncié en voz baja ya que el peque se quedó durmiendo en el salón mientras veíamos una película
-De acuerdo.-contestó Daniel.- eh.- me di la vuelta.- dame un beso
-Eres un mimoso.- me acerqué y le besé dulcemente


A partir de aquí escuchad esta POR FAVOR.-----> http://www.youtube.com/watch?v=p92mV5MofMU


Pasaron cinco meses, Daniel de nuevo tuvo que irse de gira, esta era la última que hacían como grupo así que yo y Dani asistimos al último concierto.


-Esta canción se la dedico a dos personas muy importantes y especiales para mi, esto es siempre estás ahí.- nos miró a los dos y yo sonreí
-Papá nos ha mirado.- dijo emocionado
-Si.- lo cogí en brazos.-
-Antes de empezar a cantar me gustaría subir a esas dos personas que lo son todo, _____ y Dani subid por favor.- un guardia nos acompañó y subimos, estaba muy sorprendida, llegamos al escenario, dejé al peque en el suelo y Dani me abrazó con todas sus fuerzas
-Te amo.- dije y escuché un awww por parte del público, al parecer se escuchó.
-Y yo a ti.- me besó, me dejó de abrazar y miró a Dani.- ven aquí campeón.- se agachó y el peque fue corriendo y le abrazó.
-Papá nos están mirando.- rió
-Si, son nuestras fans ¿les dices algo?
-Hola.- rió.


Dani y yo nos quedamos detrás del escenario y ¿sabéis a quién me encontré? ¡a mis chicas!

-¿_____?.- pronunció María
-¿Chicas?.- las vi y nos abrazamos todas, habíamos pasado muchísimo tiempo sin vernos y las había echado de menos.
-Cuanto tiempo sin veros.- iba a llorar, tarde o temprano iba a hacerlo
-Cuatro años, perdonadme pero mis lágrimas están a punto de salir.- dijo Ángeles
-Las mías también.- sonrió Clara
-Lloremos todas y ya está.- nos quedamos observando a los chicos como daban todo en el escenario por sus fans, habían crecido un montón pero sus corazones seguían siendo igual de grandes que siempre. Esta historia siempre la iba a recordar como la mejor de mi vida, hubo momentos malos pero mereció la pena. 


Terminó el concierto pero los chicos volvieron a salir.


-Bueno nunca pensamos que esto fuera a acabar pero todo llega a su fin, muchísimas gracias por todo lo que habéis hecho por nosotros..-dijo Carlos
-Es increíble ver a personas que estuvieron desde el principio o simplemente ver a personas que se unieron a mitad, gracias por todo lo que habéis hecho por nosotros, siempre os vamos a estar muy agradecidos.- agregó Dani, las chicas y yo estábamos viendo todo y nos salían las lágrimas.
-¿Os acordáis cuando nos presentamos para destino eurovisión? quizá no mucha gente lo recuerde pero sé que algunas personas si, si hemos conseguido todo esto ha sido gracias a vosotros, como muchas veces dije, vosotros sois el motor de todo esto, muchísimas gracias.- contestó Blas
-Mis Auryners.- sonrió David y todas estaban llorando a más no poder.- eh eh no lloréis, es verdad que esto se acaba pero nuestra música siempre seguirá, auryn fue la mejor etapa de mi vida sin duda, junto a estos cuatro hermanos he vivido cosas increíbles, nuestra primera gira, nuestro primer premio, my camp auryn, latinoamérica, estados unidos y muchas cosas más.- David se estaba emocionando.- perdonadme ya me conocéis, soy un llorón cuando me emociono.- se secó unas lágrimas.- no puedo deciros más que gracias, gracias por todo, por estar a cada momento apoyándonos, por simplemente venir a una firma o a un concierto, muchísimas gracias.- se escuchaban aplausos por parte de todos incluso de la pequeña Dessy y de Dani.
-¿Por qué nos llamamos auryn? ¿os acordáis de esa pregunta? nos la hacían casi siempre y a partir de ahí fuimos creciendo con toda vuestra ayuda, cada momento que hayáis vivido con nosotros por muy pequeño que haya sido yo lo voy a llevar siempre en mi corazón, sin vosotros no somos nada, que sepáis que siempre vamos a estar ahí y espero que vosotros también, esto es el final pero sé que alguna vez nos cruzaremos y recordaremos todo esto como nuestra historia, os quiero hasta el infinito y más allá, gracias.- sonrió Álvaro emocionado también. 

Los cinco se levantaron de sus sillas, se dieron la mano e hicieron una reverencia en signo de gracias por todo.

-Adiós auryners, nuestro corazón es solo vuestro, ¡os queremos!.- gritaron a la vez y las luces se apagaron, y aquí se terminó todo. Los chicos bajaron y nos abrazaron a todas, todos estábamos con las lágrimas en los ojos, todo esto fue precioso.


-¿Y ahora qué?.- pregunté a Daniel
-Auryn acabó pero nuestra historia no.- sonreímos los tres
-Te amo
-Y yo a vosotros.


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Y bueno hasta aquí hemos llegado, no solo yo si no todos los que habéis apoyado esta novela desde el principio o desde hace poco, GRACIAS por todo, por cada comentario, por cada nominación aunque eso es lo de menos, gracias por haber aguantado días esperando cap, gracias por haber estado siempre ahí. No sabéis lo feliz que me ha hecho ver que desde los primeros capítulos de la primera temporada a la gente le gustaban y ya pedían siguiente, simplemente gracias, es que no puedo decir nada más. Sois lo mejor, gracias a esta novela he conocido a gente increíblemente maravillosa que ahora se ha convertido casi en una familia para mi, como Álvaro dice sin vosotros yo no soy nada, esta novela no sería nada. Sé que ha habido algunas discusiones sobre algún cap y que yo tuve que aguantar insultos pero eso da igual, me quedo con lo bueno. Jamás pensé que esta novela llegaría a más de trescientas mil visitas o a que a tanta gente le gustase. Muchas personas me llaman ídola pero no, no lo soy, solo soy una auryner más que apoya a sus ídolos e hizo una novela, aquí las únicas personas que realmente se merecen un monumento sois vosotros por aguantarme cada día, semana, mes e incluso años. Con esto dejo de enrollarme.

MUCHÍSIMAS GRACIAS POR TODO, SOIS INCREÍBLES.
OS QUIERO MUCHÍSIMO. 


Y con esto me despido pero eh, nos veremos muy pronto en mi próxima novela, no os vais a deshacer tan fácil de mi
:)

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